viernes, 7 de febrero de 2014

Tarta de calabaza

Ay madre las ganas que tenía de hacer una pumpkin pie!! es un postre típico que se hace en Estados Unidos para acción de gracias, lo he visto tantas veces en las pelis americanas y desde que probé la calabaza en los postres como en estos cupcakes de calabaza, me conquistó más todavía y hasta ahora no he encontrado el momento, bueno de hecho la hice antes de Navidad pero con lo liada que he estado me ha sido imposible enseñárosla hasta ahora, la receta la he adaptado un poco de todas las que he visto por internet y la verdad es que me ha salido muuuy rica.

Un besote.

Ingredientes:
500 grs. de puré de calabaza (aproximadamente)
200 ml. de nata 
150 grs. de azúcar (si tenéis 90 grs. de azúcar moreno y 60 grs. de azúcar blanquilla)
2 huevos
2 cucharaditas de canela
1 cucharadita de jengibre en polvo
1 pizca de nuez moscada (yo no le he puesto)
1/4 de cucharadita de clavo molido
1 lámina de hojaldre

Preparación:
Primero haremos el puré de calabaza, yo lo hago pelando la calabaza y quitándole las semillas y cortándola en trozos y la pongo en el microondas tapada con un papel film durante 7 o 8 minutos, o hasta que esté blandita. La dejamos enfriar totalmente y la trituramos.
Ahora ponemos el horno a precalentar a 220ºC y mientras preparamos la base de hojaldre, ya os he comentado varias veces que a mi me gusta que el hojaldre esté crujiente y por eso lo horneo durante 10 minutos antes de poner la mezcla. Así que, estendemos el hojaldre en un molde desmoldable y lo pinchamos para que no suba, le ponemos un papel de horno encima y sobre éste unos garbanzos secos (si no tenemos, le ponéis algún recipiente apto para horno, yo le pongo un plato) para evitar que suba y lo cocemos durante 10 minutos, hasta que esté un poco dorado.

Mientras se cuece el hojaldre preparamos el relleno, en un bol batimos los huevos con el azúcar, añadimos la nata y las especias y seguimos batiendo hasta que quede bien integrado, añadimos la calabaza y terminamos de mezclar (quedará bastante líquido)
Sacamos el hojaldre del horno y lo dejamos entibiar un poco y ponemos el relleno sobre el hojaldre y lo volvemos a llevar al horno unos 15 minutos a 220ºC y después bajamos el horno a 175ºC y lo horneamos durante 40-50 minutos hasta que al pincharlo con un palillo salga totalmente seco.
Dejarlo enfriar unas 2 horas antes de comer, aunque yo os recomiendo una vez frío ponerlo en la nevera tapadito con un film hasta el día siguiente, los sabores se asientan y esta mucho pero mucho más bueno.
Lo podemos comer sólo o como veis acompañado de un buen pegote de nata.

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